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Mitsubishi Eclipse Cross AWD 220 Di-D
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Mitsubishi Eclipse Cross AWD 220 Di-D

Mitsubishi Eclipse Cross AWD 220 Di-D

18 de septiembre de 2019

Equipado con una interesante motorización diesel de 148 CV y un cambio automático de 8 velocidades, parte de 33.900 euros.

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El SUV intermedio de Mitsubishi, el Eclipse Cross, vuelve a apostar por las motorizaciones diesel. La introducción de versiones con este combustible era incierta en el lanzamiento del modelo. Ahora, con nuevas tecnologías de reducción de emisiones, aparece un renovado 2.2 DI-D de 148 CV con alto refinamiento y eficiencia aceptable. La versión probada, con tracción integral AWD, cambio automático de 8 marchas y equipamiento alto Kaiteki, cuesta, con descuentos de marca, 35.900€.
 
El Eclipse Cross, con sus 4,41 metros, está por tamaño entre los otros SUV de la marca, el más compacto ASX (4,36m) y el más grande Outlander (4,69m). El Eclipse Cross de esta prueba tiene una excelente relación precio-equipamiento, por lo que puede ser alternativa económica de SUV premium  como el BMW X1 xDrive 18d 4x4 automático de 150 CV (40.360€) o el Range Rover Evoque D150 AWD Auto de 150 CV (45.900€).
 
Aventaja a rivales en precio y equipamiento de serie
Entre competidores de marcas generalistas algo más asequibles la lista es larga, aunque destacan por precio, equipamiento y prestaciones: el Volkswagen Tiguan Advance 4Motion 2.0 TDI 150 CV, aut. DSG7 (39.080€); el Jeep Compass Night Eagle 4x4 2.0 Multijet 140 CV Auto (38.545€); el Skoda Karoq Scout 4x4 2.0 TDI Aut. DSG7 de 150 CV (35.000€); el SEAT Ateca Xcellence 4Drive 2.0 TDI 150 CV Aut. DSG7 (35.000)  y el Ford Kuga Titanium 4x4 2.0 TDCi 150 CV aut. PowerShift 6v (con desc.32.600€).
 
Mitsubishi suele aventajar a modelos rivales de similares características con una amplia dotación tecnológica. El modelo que nos ocupa va bien equipado de serie con sistemas de seguridad y protección de ocupantes, dispositivos de ayuda a la conducción, confort a bordo y conectividad. Por ejemplo, además de los muchos elementos ya habituales en este nivel, la unidad probada destaca por otros equipos que en sus competidores suelen tener sobreprecio.
 
El Eclipse probado cuenta de serie con faros bi-LED y control automático de luces de carretera, control de velocidad adaptativo, mitigación de impacto frontal con detección de peatones, cámara de visión trasera y de 360º, Head upDisplay (proyección de datos de viaje en parabrisas), asientos delanteros con calefacción, freno de mano eléctrico, techo panorámico eléctrico, tapicería de cuero, antena de techo tipo aleta de tiburón, conexión Bluetooth para móviles y aplicaciones para smarphone’s compatibles con los sistemas Apple Car Play y Google Android Auto, pantalla táctil de 7 pulgadas, radio digital DAB y sonido Premium Rockford Fosgate de 710W y con 9 altavoces.
 
Vuelve el diesel en Mitsubishi
La novedad más importante en la versión probada es la nueva apuesta diésel, combustible sólo mantenido por la marca en los pick up L200 y ya desestimado en los modelos que se venden en Europa como el ASX, Outlander y SpaceStar. A diferencia de otros fabricantes, que en los nuevos diesel reducen cilindrada y tamaño, Mitsubishi mantiene propulsores de mayor cubicaje, como en este caso un bloque de cuatro cilindros y 2.268 centímetros cúbicos, que tiene la ventaja de lograr un funcionamiento suave y silencioso, pero la desventaja de un mayor peso y un consumo algo menos contenido.
 
Aluminio y AdBlue para reducir el impacto medio ambiental
No obstante, para reducir peso, consumo y emisiones se ha empleado mayoritariamente el aluminio en la construcción del motor (bloque y culata). Como se sabe, las emisiones más preocupantes de los diésel son las de NOx (nitrógeno), que se reducen en este motor con el aditivo AdBlue, que se suministra en un depósito adicional entre 3.500 y 14.000 km, según el uso del vehículo, que tiene una alerta para el suministro de esta urea.
 
El consumo homologado de gasóleo en ciclo combinado con el protocolo WLTP es de 6,9 litros cada 100 km. En nuestro recorrido habitual en modo ‘eco’, por autovía llana, dos ocupantes y bultos pequeños, el gasto ha sido de 7,4 litros/100 km, por lo que en un viaje largo, la autonomía puede ser de unos 800 km. En pistas no asfaltadas, tráfico denso en ciudad, cuestas prolongadas o subida a puertos, el consumo medio ha sido de unos 8,3 litros/100 km.
 
El motor diesel 2.2 tiene un funcionamiento suave y es poco ruidoso.  El habitáculo está bien aislado, no llegan vibraciones de ningún tipo y en el máximo régimen permitido sólo se perciben algunos ruidos aerodinámicos, que pueden provenir de los grandes retrovisores. El cambio es de convertidor de par con 8 relaciones, y no como el automático de variador continuo (CVT) con que cuenta la versión de gasolina, que sólo gusta a los que pretenden una conducción muy relajada.
 
Cambio de accionamiento suave y sin tirones
Para nuestro gustonos parece mejor el cambio de esta prueba, porque sin lograr una aceleración brillante, tiene mejor respuesta y nada de tirones, ni en alta ni en baja. Además se adapta a  los modos ‘eco’ y ‘sport’. En el modo económiconos ofrece una respuesta más lenta, más bien perezoso, pero ahorra combustible y resulta ideal para velocidad constante por autovía; y en el modo sport se obtiene una respuesta más inmediata, porque va más revolucionado y, por supuesto, gasta algo más.  
 
 
En cuanto a comportamiento dinámico no es diferente a la versión de gasolina. Tienen en común que son nobles en todos los terrenos. Por carreteras amplias o autovías ofrece mejores sensaciones. Las suspensiones son confortables, más bien blandas, absorbe los baches del asfalto con suavidad y muestra una excelente calidad de rodadura, incluso en carreteras en mal estado. No hay movimientos excesivos de carrocería en curvas y la estabilidad es incuestionable.
 
Tracción inmejorable en gravilla suelta
Como esta prueba se hizo en verano, que suele ser época de secano, no lo hemos podido probar en barro, donde se comprueba la eficacia de la tracción. No obstante hemos rodado por pista con gravilla suelta y algunos desniveles algo exigentes, especiales para todoterrenos puros y con altura libre razonable, pero nuestro Eclipse no pasa de 183 mm, aunque con cuidado no ha decepcionado. En zonas de gravilla suelta no hemos notado ni la mínima pérdida de tracción y se ha mantenido siempre fiel a la trayectoria indicada. El sistema 4x4 (SuperAll Wheel Control) reparte el par en tres modos según las necesidades: Auto (de 80:20 a 55:45), Snow – nieve- (de 80:20 a 45:55) y Gravel – gravilla – (de 70:30 a 40:60).
 
El interior ofrece un entorno agradable por diseño y por materiales de buena calidad. El puesto de conducción es ergonómico y con ajustes eléctricos del asiento en varias posiciones para todas las tallas. La visibilidad es correcta por el parabrisas y por los retrovisores exteriores, a excepción del espejo central, puesto que la luna posterior está atravesada por un spoiler rojo en forma de barra, no obstante cuenta con una alerta luminosa en los retrovisores sobre los vehículos que nos siguen y están fuera del ángulo de visión.
 
La habitabilidad es buena delante y detrás. El espacio longitudinal para las piernas puede ser óptimo, ya que las banquetas traseras se pueden deslizar hasta 20 cm. En  los asientos traseros, sólo dos personas adultas y de más de 1,80 podrán ir cómodas, porque el asiento central es estrecho, duro e incómodo para apoyar las piernas, debido al túnel central de transmisión. En esa parte lo mejor es desplegar el magnífico apoyabrazos. El volumen del maletero es variable, con las banquetas traseras retrasadas al máximo la capacidad es de 359 litros, en cambio cuando están adelantadas 466 litros, y totalmente tumbadas, 1.105 litros. No hay sitio para una rueda de repuesto y el poco espacio restante está aprovechado por un kit repara-pinchazos.

DATOS TÉCNICOS
Motor.- Combustible: diésel. Cilindros: 4, en línea. Cilindrada: 2.268 c.c. Distribución: doble árbol de levas; 4 válvulas por cada cilindro (16v). Potencia máxima: 148 CV a 3.500 rpm. Par máximo: 388 Nm a 2.000 rpm. Alimentación: inyección directa en conducto común, con turbo e intercooler. Con sistema de parada y arranque automático Stop&Start. Normativa de emisiones que cumple: Euro 6 AG.
Transmisión.- Tracción: total AWD. Caja de cambios: automática, de convertidor de par, 8 velocidades, con levas tipo orejones detrás del volante para el cambio manual secuencial.
Dirección.- Tipo: de cremallera, con asistencia eléctrica. Diámetro de giro entre aceras: 10,6 metros. Vueltas de volante entre topes: 2,85.
Frenos.- Delanteros, de discos ventilados (diámetro 320 mm); traseros, de discos (302 mm). Ayudas electrónicas de serie: antibloqueo ABS, distribución electrónica de frenado EBD, asistente a la frenada de emergencia BAS, asistente al arranque en cuesta HSA, señalización de frenada de emergencia ESS, mitigación de colisión frontal con detección de peatones FCM, control de tracción S-AWC y control de estabilidad ASTC.
Suspensiones.- Eje delantero: tipo McPherson, muelles helicoidales y barra estabilizadora. Eje trasero: tipo multibrazo, muelles helicoidales y barra estabilizadora.
Dimensiones, capacidades y pesos.- Carrocería: SUV todoterreno. Puertas: 5. Plazas: 5 (2+3). Longitud: 4.405 mm. Anchura: 1.805 mm. Altura: 1.674 mm. Vía delantera: 1.545 mm Vía trasera: 1.545 mm. Distancia entre ejes (batalla): 2.670 mm. Volumen mínimo de maletero: 360 litros (max: 1.100 l). Depósito de combustible: 60 litros. Peso: 1.720 kg. Peso máximo admisible: 2.300 kg.
Ruedas.- Llantas: de aleación ligera 18”. Neumáticos: Yokohama BlueEart E70
225/55 R18 98H. Repuesto: kit repara-pinchazos.
Aptitudes 4x4.- Ángulo de ataque: 20,3º. Ángulo de salida: 30,8º. Ángulo ventral: 18,9º. Altura libre: 183 mm.
Prestaciones.- Velocidad máxima: 193 km/h. Aceleración de 0 a 100 km/h: en 11,7 segundos. Consumo medio en ciclo mixto cada 100 km (homologación WLTP): 6,9 litros. Emisiones CO2(ciclo mixto): 183 gramos/km. Impuesto de Matriculación en España: 9,75%.
Precio: con descuento de marca, 35.900€ (Kaiteki).
 
Julio Benítez – www.vidapremium.com

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