Agotada la edición especial First Edition con su estética retro y faros redondos a un precio de 85.950 euros, Toyota abre los pedidos del Land Cruiser VX con motor turbodiésel de 2.8 litros y 204 CV que ya se puede reservar desde 76.450 euros. Es un coche muy esperado, pues retoma la estética de los modelos originales, acumulando un legado de 70 años en materia de todoterreno.
Es un coche muy importante para Toyota a nivel global, que en España acumula más de 72.500 unidades vendidas desde el año 2000 en diferentes generaciones. Esta primavera se pone a la venta un Land Cruiser completamente renovado que vuelve a sus orígenes, combinando un aspecto elegante con un aire aventurero en el que no faltan detalles de lujo ni la última tecnología en materia de conectividad.
El nuevo Land Cruiser mide 4,92 metros de longitud (+80 milímetros), 1,98 metros de anchura (+95 milímetros), 1,92 metros de altura (+75 milímetros) y una distancia entre ejes de 2,85 metros (+60 milímetros), de modo que ha crecido ligeramente en todas sus cotas para ganar habitabilidad, manteniendo la altura libre al suelo de 215 milímetros.
Únicamente estará disponible para el mercado europeo con la mecánica turbodiésel (1GD-FTV) de 2.8 litros que entrega una potencia máxima de 204 CV (150 kW) y 500 Nm de par –compatible con biodiesel 100%- y una transmisión automática Direct Shift de 8 velocidades con convertidor de par. El consumo medio homologado es de 9,6 litros/100 km (WLTP) y unas emisiones de CO2 de 276 g/km, cumpliendo la normativa Euro 6 y obteniendo la etiqueta C de la DGT al no contemplar ningún tipo de ayuda eléctrica, que posiblemente llegue en 2025 con tecnología Mild Hybrid de 48 voltios.
En primavera llegará a España el Land Cruiser VX, el acabado intermedio de la gama que ya viene equipado con asientos de piel calefactables y ventilables, techo solar panorámico practicable, faros con tecnología Full LED más alargados que el First Edition y bloqueo de diferencial trasero, además de un cuadro de instrumentos 100% digital que integra el sistema Toyota Smart Connect en la pantalla central de 12,3”, sistema de audio JBL con 12 altavoces, Head-Up Display, llave digital inteligente y retrovisor interior digital. Al mercado español llegarán únicamente 500 unidades.
La gama se completará en 2025 con un acabado de acceso GX y otro más lujoso VXL, más el VX. Todos llevarán etiqueta ECO al montar el sistema de hibridación de 48 voltios MHEV, y Toyota tiene previsto comercializar un máximo de 1.250 unidades en todo el año 2025.
Resulta bastante atractivo a nivel estético, sobre todo el frontal con una nueva parrilla que incluye en la parte superior las letras de Toyota en mayúsculas –desaparece el logo-, los faros rectangulares LED y unos paragolpes muy robustos, acompañados de pasos de rueda muy marcados en color negro con trazos rectilíneos. La trasera es más conservadora, con trazos angulosos, grupos ópticos con tecnología LED y un protector de aluminio en la parte inferior del paragolpes, ocultando las salidas del escape.
La responsabilidad de un impecable comportamiento dentro y fuera del asfalto es de la plataforma GA-F, más rígida y moderna al ofrecer la posibilidad de integrar algunos de los asistentes a la conducción más avanzados. La rigidez se incrementa en un 50% respecto al anterior bastidor y mejora la resistencia un 30%. Entre las novedades destaca una dirección con asistencia eléctrica EPS más suave y precisa, así como el Sistema de Mantenimiento de la Trayectoria en el paquete Toyota Safety Sense.