2017/11/19/md/2646_2.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_3.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_4.jpg
Salpicadero del nuevo Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_5.jpg
Detalle del Volkswagen DigitalCookpit
2017/11/19/md/2646_6.jpg
Palanca del cambio DSG
2017/11/19/md/2646_7.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_8.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_9.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_10.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_11.jpg
Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_12.jpg
Interior del Volkswagen Polo
2017/11/19/md/2646_13.jpg
Control de Crucero Adaptativo (ACC)
2017/11/19/md/2646_14.jpg
Cinco motores gasolina de 65 a 200 CV y dos diesel
2017/11/19/md/2646_15.jpg
El nuevo Polo en la factoría de Landaben (Navarra)

Volkswagen Polo

19 de noviembre de 2017

Algo más grande, estrena plataforma MQB, un diseño más refinado y eficientes motores de 65 a 115 CV, más un GTI de 200 CV.

Compartir en:

A lo largo de seis generaciones el Volkswagen Polo ha ido creciendo hasta ocupar el puesto del Golf de hace unos años. Desde su lanzamiento en 1975, cuando medía 3,50 metros de longitud, se han vendido 14 millones de unidades, de las cuales 7,5 millones se han fabricado en la planta de Landaben (Navarra), una de las más modernas del grupo, de la que sale un coche cada 56 segundos listo para enviar a alguno de los más de 50 países donde se exporta.
 
El nuevo Polo ya está a la venta con precios que parte desde los 11.600 euros incluyendo descuentos promocionales para el modelo con motor de gasolina 65 CV y acabado Edition, el de acceso a la gama. Crece en longitud hasta los 4,05 metros (8 centímetros más), también es más ancho (1,75 metros, 7 centímetros más) y es un centímetro más bajo (1,45 metros), con una batalla de 2,65 metros, 10 centímetros más que el modelo anterior. Esto ha permitido añadir espacio para las piernas en las plazas traseras y crear un maletero más amplio que con 349 litros de capacidad (69 más) se sitúa entre los mejores de su categoría.
 
Manteniendo las líneas básicas de un coche que es un referente en su categoría, el nuevo Polo se ha hecho mayor con un diseño que mezcla un toque de elegante deportividad para acercarse cada vez más a su hermano mayor el Golf, sobre todo en la parte frontal, más robusta, mientras que la trasera sigue teniendo personalidad y estilo. Las líneas exteriores de la carrocería están muy elaboradas, con numerosos trazos en cada uno de los paneles y formas que definen una estética fácilmente reconocible y de aspecto moderno.
 
En esta generación únicamente habrá una carrocería de cinco puertas, incluso en el Polo GTI cuando llegue dentro de unos meses. Su aspecto es más deportivo en líneas generales, sobre todo con el nuevo frontal que enlaza las luces diurnas LED con la sencilla parrilla frontal, y muestra más aplomo sobre el asfalto al haber crecido la distancia entre ejes. El comportamiento sobre el asfalto es muy bueno, incluso en carreteras con mal firme la suspensión hace un buen trabajo, con un tarado confortable en vías rápidas y una buena absorción con el asfalto roto.
 
La insonorización del habitáculo filtra bastante bien los ruidos procedentes de la rodadura y también de la mecánica. El aspecto más negativo de los motores de tres cilindros aparece cuando afrontamos carretas de montaña y necesitamos acelerar fuerte para realizar un adelantamiento rápido, con un sonido que no resulta para nada agradable. Es el precio que tenemos que pagar por el ‘downsizing’, la reducción del tamaño de los motores para obtener bajas cifras de consumo.
 
El interior sigue una línea continuista, cada vez más parecido al Golf y otros modelos del fabricante alemán. La versión probada no llevaba el Digital Cookpit, sino los dos relojes clásicos analógicos tras un volante de buen tacto con mandos para el sistema de audio, teléfono y control de crucero adaptativo. En el centro del salpicadero la pantalla táctil de 8” con muy buena definición y muchas posibilidades de conectividad si enlazamos nuestro teléfono mediante cable, pudiendo acceder a la navegación con Google Maps o gestionar llamadas y música.
 
Los asientos delanteros siguen siendo un referente por comodidad y posibilidades de regulación. Ya puedes hacer kilómetros que apenas te cansas cuando llegas al destino, y eso no se puede decir de todos los coches. La posición al volante resulta muy buena y la calidad de los plásticos es aceptable, con bastantes de ellos blandos y buenos ajustes. Las plazas traseras ganan algunos centímetros para las rodillas y el maletero es ahora más amplio, cosa que se agradece siempre.
 
En primer lugar hemos probado el motor 1.0 TSI de 95 CV, una opción totalmente lógica para un uso mixto por ciudad y carretera. Esta mecánica de tres cilindros lleva un turbo con el que logra una potencia de 95 CV a 5.500 rpm y un par máximo de 170 Nm entre 2.000 y 3.500 rpm), asociado a un cambio manual de 5 velocidades. Alcanza una velocidad máxima de 187 km/h y acelera de 0 a 100 en 10,8 segundos, unas prestaciones más que suficientes para el uso que va a recibir durante su vida, y lo mejor de todo es el consumo, con una media de 4,5 litros y unas emisiones de CO2 de 103 g/km. En nuestra prueba, de más de 200 kilómetros por carreteras de todo tipo, en un recorrido bastante exigente, ha sido de 5,5 litros, que está muy bien. Si queremos circular a un ritmo alegre en carreteras secundarias de montaña hay que llevarlo alto de revoluciones.
 
En líneas generales, el comportamiento del coche ha mejorado y resulta muy ágil en curvas, estable en rectas y obedece de una manera fiel al trazado que hacemos con el volante, incluso cuando enlazamos curvas rápidas. Transmite una gran sensación de seguridad gracias a un chasis que está bien afinado y resulta agradable en cualquier situación. Frena bien y en aceleración pone bastante voluntad, notándose la falta de potencia. Nos ha faltado una prueba en recorrido urbano más amplia para completar sensaciones.
 
Las opciones mecánicas son muchas en el nuevo Polo, aunque habrá quien eche de menos versiones más deportivas, pero el mercado es el que manda y al final se trata de un vehículo de uso urbano en el que se ha buscado la máxima eficiencia y la reducción de consumo, es decir, motores pequeños. En gasolina hay dos atmosféricos 1.0 MPI de 65 y 75 CV y dos 1.0 TSI de 95 y 115 CV, además de un GTI que tardará unos meses en llegar con el motor 2.0 TSI y una potencia de 200 CV, 8 más que el Polo GTI al que sustituye. También habrá dos diesel -1.6 TDI de 80 y 95 CV- que cada vez tienen menos ventajas frente a los pequeños propulsores de gasolina. Y la novedad es un motor de gas natural comprimido (GNC), el 1.0 TGI de 90 CV, que con dos depósitos, uno de gasolina y otro más pequeño de gas, puede recorrer hasta 1.400 kilómetros.
 
La gama se estructura con cuatro niveles de acabados –Edition, Advance, Sport y GTI-, además de tres paquetes de equipamiento –R-Line, Style y Black Style-, combinados con 14 colores de carrocería, 12 versiones de llantas, 11 tapicerías de asientos, techos en color y detalles interiores personalizados. El equipamiento puede ser muy completo gracias a la utilización de la nueva plataforma MQB, heredando algunos elementos del Golf y el Passat que mejoran el confort y la seguridad.
 
De serie viene equipado con el sistema Front Assist con freno de emergencia en ciudad y detección de peatones. Entre los numerosos sistemas de ayuda que puede montar de forma opcional destacamos el asistente de cambio de carril con detector de ángulo muerto, el Control de Crucero Adaptativo (ACC) con regulación de la distancia de seguridad respecto al coche que nos precede y hasta faros LED y el asistente de salida de aparcamiento que avisa si detecta otros vehículos.
 
Por primera vez puede montar el Volkswagen Digital Cookpit, un cuadro de mandos con pantalla digital de 12” totalmente personalizable que ya llevan otros modelos de mayor tamaño en el grupo y que es novedad en este segmento. Y, por supuesto, es perfectamente compatible con los Smartphone de última generación a través de la interfaz de integración App-Connect, con distintos sistemas de navegación y apps para tener la máxima conectividad a bordo.
 
Los precios del nuevo Polo, sin descuentos aplicados, son los siguientes:
Polo Edition 1.0 65 CV: 14.745 €
Polo Edition 1.0 75 CV: 15.305 €
Polo Edition 1.0 TGI 90 CV: 19.625 €
Polo Advance 1.0 75 CV: 16.055 €
Polo Advance 1.0 TSI 95 CV: 17.035 €
Polo Advance 1.0 TSI 95 CV DSG: 18.705 €
Polo Sport 1.0 TSI 95 CV: 17.795 €
Polo Sport 1.0 TSI 95 CV DSG: 19.465 €
Polo Sport 1.0 TSI 115 CV: 18.495 €
Polo Sport 1.0 TSI 115 CV DSG: 20.165 €
 
José A. Prados (Navarra) – www.vidapremium.com

Compartir en:

Vidapremium te recomienda