Las ventas en 2012 de Skoda batieron su cifra récord con 939.200 coches vendidos en todo el mundo y 2013 arranca con la presentación del nuevo Octavia, que llegará a los concesionarios en el mes de marzo en carrocería berlina y novedades muy importantes respecto a las dos generaciones anteriores en mecánicas, diseño y tecnología.
Con 3,7 millones de unidades vendidas desde su lanzamiento en 1996, el Skoda Octavia es un icono para el fabricante de automóviles checo, que ha puesto toda la carne en el asador para la renovación de un modelo que es pieza clave en los planes de futuro de la marca, con un lanzamiento cada seis meses hasta 2015.
La tercera generación del Skoda Octavia llegará a los concesionarios a principios del mes de marzo y crear al sucesor de un coche con tanto éxito no ha sido una tarea fácil. Los responsables de este nuevo producto lo definen como un vehículo espacioso, ingenioso y asequible, y nosotros añadimos que su diseño ha evolucionado notablemente para dar un salto en imagen y calidad percibida.
Siempre ha destacado en su segmento por aportar ideas innovadoras y tecnologías avanzadas a un precio único, y en la tercera entrega de esta berlina media se ratifica esta idea. Ahora es más grande y habitable, mejorando los aspectos en los que siempre ha destacado y aportando soluciones y tecnología asequible a todos los bolsillos.
Mide 4,66 metros de longitud (90 milímetros más), 1,81 de ancho (45 milímetros más), 1,46 de alto y la distancia entre ejes es de 2,69 metros (104 milímetros más), de modo que es más espacioso en el interior y tiene el mejor maletero de la categoría, con 590 litros básicos que pueden ampliarse hasta 1.580 litros al abatir los asientos traseros y permite llevar objetos largos como tablas de surf cuando se abate el asiento del copiloto.
Es el mejor Octavia que se haya fabricado jamás y en esta ocasión se ha cuidado de una manera especial el diseño, con formas cristalinas y unas líneas que son modernas y atemporales. Empezando por el frontal, que estrena una parrilla en la que el marco va cromado y las barras en negro mate y el nuevo logo de la marca se traslada a la parte superior, en el capó, donde tiene una presencia mayor. La distribución de los elementos se realiza en forma horizontal, con unos grupos ópticos que incorporan luz diurna formada por una tira LED en la parte inferior y nuevos antinieblas cubiertos por un protector de cristal.
La silueta lateral es más fluida con unos trazos que recuerdan a un coupé y los hombros están muy marcados, creándose en las puertas un juego de luces y sombras. En la zaga, las luces forman la típica ‘C’ que identifica a los modelos de Skoda, monta un difusor en color negro y tiene unas formas más modernas.
Variedad mecánica
Los motores del nuevo Octavia han sido renovados por completo, con una oferta de ocho motores –cuatro gasolina y cuatro diésel- desde 85 a 180 CV que se irán incorporando a lo largo de este año, primero con tracción delantera y en verano también con tracción 4x4 en algunos modelos. En el mes de marzo estarán disponibles el 1.2 TSI de 85 CV, 1.2 TSI de 105 CV y 1.8 TSI de 180 CV, mientras que en diésel vendrá con el 1.6 TDI de 105 CV y 2.0 de 150 CV, y en mayo se podrá solicitar el 1.6 TDI de 90 CV y en noviembre el 1.6 TDI de 110 CV GreenLine, que ha homologado un consumo de 3,4 litros de media y emisiones de CO2 de 89 g/km.
El abanico de posibilidades para elegir mecánica es muy completo. En la toma de contacto que hemos realizado con el nuevo Octavia por carreteras del sur de Portugal, en la zona de Faro, elegimos el 1.6 TDI de 105 CV para realizar un recorrido de unos 150 kilómetros que transcurrían por todo tipo de vías, con un pequeño tramo de autovía en el que mostró un gran aplomo y cualidades ruteras y mucha carretera de doble sentido con muchos toboganes y curvas donde el coche ha mostrado un comportamiento impecable, realizando un buen trabajo la suspensión, de tarado firme pero cómodo. El consumo medio no ha llegado a los 5 litros, y el ritmo ha sido rápido.
Otro modelo que hemos probado ha sido el 1.2 TSI de 105 CV que nos ha sorprendido por las buenas prestaciones y el buen tacto que proporciona al volante. En carreteras de montaña ha marcado 6 litros de media en un recorrido de unos 50 kilómetros y resulta muy agradable de tacto, aunque el cambio es de 5 velocidades.
Para finalizar la jornada hemos conducido el 2.0 TDI de 150 CV, un motor que va muy sobrado de potencia en cualquier situación sin que el gasto se dispare: 6 litros de media. Llevaba el cambio DSG de doble embrague con seis velocidades y pulsadores en el volante para cambiar de marcha, una opción muy recomendable.
Salto cualitativo
Todavía no hemos hablado del interior, y es uno de los aspectos más destacados del nuevo Octavia. Al incrementar la batalla se ha ganado espacio para los pasajeros, que ahora tienen el mismo espacio para las rodillas en la fila delantera y en la trasera y el maletero ofrece una gran capacidad y un buen acceso a través del enorme portón.
El salpicadero se estructura a partir de una línea horizontal y un diseño muy sencillo que forman las salidas de aire con marcos cromados y en el centro una pantalla multifunción táctil de 8” en la que se maneja el navegador, equipo de sonido, teléfono y ajustes del vehículo, y en una línea inferior los mandos del climatizador. El cuadro de instrumentos está presidido por dos grandes relojes analógicos con los números en blanco y una pantalla en el centro a color donde aparecen todos los datos del ordenador de viaje, que es muy completo.
Los materiales empleados son de buena calidad, con la parte superior del salpicadero acolchada y buenos ajustes que contribuyen a un magnífico confort de marcha. La insonorización del habitáculo y el aislamiento del motor son parte de un refinamiento propio de berlinas de mayor tamaño.
Soluciones prácticas
El lema de Skoda es ´Simply Clever´, que se traduce en hacer la vida más fácil a bordo del vehículo con pequeños detalles como la bandeja del maletero extraíble que se puede colocar detrás del asiento sin restar espacio, un rascador para el hielo en la tapa del depósito del combustible, enchufe de 230 voltios en los asientos traseros, 8 portabotellas en puertas, consola central y reposabrazos posterior, chaleco de emergencia debajo del asiento del conductor o un sistema de sujección de la carga del maletero que consiste en unas pequeñas piezas de plástico que se sujetan a la moqueta con velkro.
Y en materia de seguridad puede montar el sistema Multi Colision Brake, que frena para evitar colisiones en cadena, Assist Frontal, que avisa si la distancia respecto al vehículo que nos precede es muy reducida y puede llegar a frenar si hay riesgo de colisión, el asistente de cambio involuntario de carril, detector de fatiga del conductor, sistema de prevención de accidente, que tensa los cinturones y cierra las ventanillas cuando entra en funcionamiento el control de estabilidad, control de velocidad de crucero adaptativo ACC, sistema de reconocimiento de señales de tráfico y hasta 9 airbag, incluido el de rodillas para el conductor y laterales para los pasajeros traseros.
Los responsables de Skoda España no han podido comunicar todavía los precios que el Octavia tendrá en nuestro país, pero aseguran que no variará mucho del modelo actual.
José A. Prados, Faro (Portugal) – www.vidapremium.com