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Fiat 124 Spider Lusso

Fiat 124 Spider Lusso

16 de octubre de 2017

Una dosis de diversión con la capota abierta gracias a la tracción trasera, un motor 1.4 Multiair de 140 CV y un afinado chasis.

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Surgido de la colaboración con la firma japonesa Mazda, el Fiat 124 Spider es un roadster accesible que retoma la tradición en este tipo de vehículos de la marca italiana, hasta el punto de que han decidido mantener el mismo nombre. De líneas modernas y trazos muy cuidados, este deportivo descapotable de 4,05 metros de longitud comparte numerosos componentes con el Mazda MX-5 de aspecto algo más agresivo y con una variedad mecánica más amplia -131 y 160 CV-, con la misma filosofía de conducción pura y divertida.
 
Un capó largo y afilado, con los nervios bien marcados, voladizos cortos, postura de conducción baja y la cabina retrasada para lograr un correcto reparto del peso son algunos de los elementos que luego se notan en la conducción, así como un sistema de construcción ligera que permite una mayor agilidad en curvas, acompañando todo esto por una dirección suave, progresiva y bastante directa.
 
De mover con alegría este coche que supera por poco la tonelada (1.050 kilos) se encarga un motor 1.4 Multiair de cuatro cilindros que entrega una potencia de 140 CV a 5.000 rpm y un par máximo de 240 Nm a 2.250 rpm. Como los deportivos clásicos, la potencia se transmite a las ruedas traseras a través de un cambio manual de 6 velocidades que está bien escalonado en sus relaciones y resulta bastante preciso en el manejo, incluso en conducción deportiva, donde transmite un buen tacto.
 
Corre suficiente (215 km/h) y la cifra de aceleración de 0 a 100 km/h (7,5 segundos) no está nada mal para pasar un buen rato en un coche cuya filosofía es más disfrutar de la conducción pura que la sensación de velocidad. Con la capota abierta se puede viajar con un buen nivel de confort hasta una velocidad de 120-130 km/h sintiendo cómo el aire acaricia suavemente el cabello y manteniendo una conversación con el pasajero, y a partir de ese momento, si pisamos más el acelerador, los ruidos rompen la magia del momento. El consumo medio homologado es de 6,4 litros, que en nuestra prueba ha subido hasta 7,5 litros, muy razonable.
 
La capota de lona negra se encarga de aislar bastante bien el ruido cuando va cerrada, pero lo ideal es llevarla recogida en la parte trasera, una operación que se realiza en unos segundos de forma manual, pues basta con quitar el bloqueo y empujarla hacia el compartimiento que hay detrás de los reposacabezas. Es algo más incómodo que los sistemas automáticos que lo hacen pulsando un botón, pero a cambio se ahorra peso y averías. En definitiva, este es un coche para tenerlo muchos años y así se evitan problemas.
 
El comportamiento del coche es muy divertido y recuerda los modelos descapotables de los años 50 y 60, aunque con un diseño mucho más moderno y tecnología más avanzada. Es tracción trasera, algo que muchos de los usuarios nunca llegarán a notar si no lo fuerzan en curvas más de lo necesario, y tiene mucho aplomo sobre el asfalto a pesar de contar con una batalla bastante reducida (2,31 metros).
 
Por su altura (1,23 metros) y la posición de conducción baja, obliga a un cierto esfuerzo para entrar en un habitáculo algo estrecho y agobiante para quienes no estén familiarizados con estos vehículos, pero que resulta muy reconfortante cuando la capota va abierta por carreteras de montaña o junto a la playa. La pega que ponen algunos pasajeros es que no hay sitio para dejar pequeños objetos en el interior, tan sólo una mini guantera junto a la palanca del cambio y un espacio entre los dos asientos para dejar la documentación del coche y poco más. Y, como se pueden imaginar, tampoco hay mucho espacio en el maletero trasero, de 140 litros de capacidad, y que no se puede ampliar de ninguna forma. Son esos pequeños inconvenientes de estos coches, que algunos suplen con un maletero externo, tipo a las ‘bacas’ metálicas de antaño, para poder desplazarse de vacaciones con más equipaje.
 
El interior está muy bien resuelto, y aunque hay quien dice que es agobiante, cuenta con un puesto de conducción cómodo, información básica a través de relojes analógicos y un ordenador de viaje que ofrece datos adicionales en una pequeña pantalla digital. Los asientos se pueden regular ampliamente y recogen bien el cuerpo en las curvas. El volante tiene un tacto muy agradable y la palanca del cambio está situada muy cerca, con un accionamiento rápido y preciso. En el centro del salpicadero, flotando, una pantalla a color con el sistema de navegación, audio y telefonía, además de la cámara de visión trasera, de gran ayuda en maniobras marcha atrás.
 
La gama para el mercado español se configura a partir del motor 1.4 Multiair de 140 CV, con tres niveles de acabado. El Base es el de acceso, pensado en quienes aprecian más el tipo de conducción a cielo abierto de este coche y no tanto el equipamiento, que es bastante completo, pues ya incluye llantas de aleación de 16”, doble salida de escape, tapicería de tela, aire acondicionado, palanca del cambio (manual) en cuero, volante multifunción, control de velocidad de crucero y capota de tela en color negro con accionamiento manual.
 
La versión que hemos probado se denomina Lusso, y desde nuestro punto de vista es la más lógica, porque apenas supone un incremento de 2.000 euros, a cambio de elementos muy interesantes como las llantas de aleación de 17”, pilar A en color plata, tubo de escape doble cromado, faros antiniebla delanteros, tapicería de piel marrón o climatizador automático, además de la posibilidad de elegir un cambio automático con convertidor de par (desde 30.770 euros).
 
La pintura Blanco Gelato tiene un precio de 450 euros y se puede solicitar un Pack Premium por 800 euros que añade sistema de acceso y arranque sin llave (Keyless Entry & GO), navegador GPS y cámara de visión trasera, o el Pack Visibilidad por 1.500 euros que incluye sensor de lluvia, lavafaros, sistema automático de regulación de faros, faros LED, sensor de luces automático y luces LED de posición. Al final, nuestra configuración sale por 30.979 euros, un capricho que con la financiación no está tan lejos del alcance de quien busque un descapotable para pasar buenos ratos al volante.
 
Los precios del Fiat 124 Spider son los siguientes:
124 Spider Base: desde 26.770€
124 Spider Lusso: desde 28.770 euros
124 Spider America: desde 32.019 euros
 
José A. Pradoswww.vidapremium.com

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