En Audi están convencidos de que todavía queda público que busca vehículos de aspecto ‘normal’ con un elevado nivel de prestaciones a los RS de serie se añade la denominación ‘performance’ para los modelos con un poco más de ‘salsa picante’.
Esta denominación se estrena en los Audi RS 6 Avant y RS 7 Sportback, que montan un motor 4.0 TFSI V8 biturbo que entrega la friolera de 605 CV (445 kW) disponible entre 6.100 y 6.800 rpm, es decir, 45 CV más que la versión de serie, y un par motor de 700 Nm entre 1.750 y 6.000 rpm. Este brillante motor incorpora además la función overboost, que permite al conductor disponer temporalmente de 750 Nm entre 2.500 y 5.500 rpm, activándose de forma automática al pisar a fondo el acelerador cuando la transmisión está en modo ‘dynamic’, momento en que el indicador de presión de soplado del turbocompresor en el menú RS se vuelve rojo.
Para alcanzar este nivel de potencia se ha recurrido a una serie de innovaciones tecnológicas como los turbocompresores twin-scroll de doble entrada que posibilitan una pronta y rápida entrega de par, la innovadora gestión térmica y la disposición de las culatas, en las que el lado de admisión va por fuera de ambas filas de cilindros y el de escape en el interior de la V, donde también se colocan el turbo y el intercooler, provocando flujos de gases cortos con mínimas pérdidas de carga y una respuesta espontánea.
Por prestaciones, están a la altura de los mejores deportivos que hay en estos momentos en el mercado, con un paso de 0 a 100 en 3,7 segundos –mejora en 0,2 segundos a los RS de serie-, una cifra brillante si tenemos en cuenta que un Porsche 911 Carrera S necesita 4,1 segundos. La aceleración de 0 a 200 se realiza en 12,1 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h limitada electrónicamente, aunque hay una versión cuya velocidad punta puede alcanzar los 280 km/h de forma opcional y hasta 305 km/h con el pack ‘dynamic plus’. En cuanto al consumo, en ciclo ECE ha homologado un promedio de 9,6 litros a los 100 kilómetros y unas emisiones de CO2 de 223 g/km.
Este motor va acoplado a una transmisión tiptronic de ocho velocidades con transiciones rápidas y progresivas que monta una bomba de aceite de alta eficiencia y utiliza refrigerante del motor en la fase de calentamiento para alcanzar la temperatura óptima de funcionamiento y conseguir un elevado rendimiento. El conductor puede elegir entre los modos automáticos D y S, o cambiar de marchas con las levas que tiene detrás del volante multifunción RS forrado en cuero, y será de gran ayuda la indicación de cambio de marcha que aparece en el head-up display con el límite del régimen del motor. Y, por supuesto, lleva sistema de tracción integral quattro que distribuye el par de forma inteligente a través de un diferencial central, con una configuración básica del 40% del par en el tren delantero y 60 en el trasero.
Los RS performance vienen con el sistema ‘drive select’ para elegir entre varios modos de conducción, suspensión neumática con reglajes específicos que puede bajar hasta 20 mm la carrocería para resultar más aerodinámico a altas velocidades, llantas de aleación de 21 pulgadas y frenos de disco ventilados radialmente con un diseño lobulado para ahorrar peso. Ya están a la venta con un precio recomendado de 143.700 euros en el RS 6 perfomance y de 151.060 euros para el RS 7 Sportback performance.
José A. Prados – www.vidapremium.com