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Audi A8
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Audi A8
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Interior del nuevo Audi A8
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Asientos delanteros del Audi A8
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Manejo de la pantalla táctil
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Controles en plazas traseras
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Los dos modelos, el A8 y el A8 L
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Audi A8 con motor 3.0 TDI
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Audi A8 con motor 3.0 TDI
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Volante y virtual cookpit
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Versión larga con motor 3.0 TFSI de 340 CV
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Versión larga con motor 3.0 TFSI de 340 CV
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Versión larga con motor 3.0 TFSI de 340 CV
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Una pausa durante la prueba con el A8 L

Audi A8

29 de enero de 2018

En carrocería de 5,17 metros o 5,30 en versión larga, incorpora grandes avances y está preparado para la conducción autónoma.

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Al ver el nuevo Audi A8 el pasado mes de junio en el evento Audi Summit en la Fira de Barcelona ya dijimos que se trataba del modelo más tecnológico del fabricante alemán. Y tras probarlo en carreteras españolas lo único que podemos hacer es confirmar lo dicho hace seis meses, porque la gran berlina alemana llega con una gran cantidad de avances en materia de seguridad y confort para situarse como un referente en este segmento, un escaparate de avances que pronto se extenderán a otros modelos de la gama.
 
Disponible en carrocería normal de 5,17 metros de longitud (desde 97.430 euros) y con carrocería larga (A8 L) de 5,30 metros de longitud con un incremento de precio de 3.000 euros, la cuarta generación del nuevo Audi A8 ya está a la venta en la red de concesionarios de la firma alemana con el objetivo de satisfacer a los exigentes propietarios de este tipo de automóviles, tanto si viajan cómodamente en las amplias plazas traseras como si deciden ponerse al volante de una de las berlinas más avanzadas del momento.
 
En su trayectoria desde 1992, el Audi A8 ha ido evolucionando de una forma considerable en cada una de sus cuatro generaciones, volviéndose un coche cada vez más sofisticado, elegante y siempre con la mejor tecnología disponible. Ya desde el primer momento sorprendió por utilizar una carrocería fabricada íntegramente en aluminio con el objetivo de reducir peso y siempre ha ido ‘a la vanguardia de la técnica’, según el lema de la marca de los cuatro aros.
 
El nuevo Audi A8 da un cambio radical en materia de diseño, aunque conservando ciertos rasgos para que el público pueda tenerlo siempre identificado. Lo más destacado está en el frontal con la nueva parrilla Single Frame de forma hexagonal y más ancha, heredada del prototipo Prologe, faros LED de serie –que pueden ser Matrix LED de forma opcional o Láser, con un alcance de hasta 700 metros- y unos elegantes trazados en la vista lateral que muestran al completo las grandes dimensiones de un coche en el que los pasos de ruedas van muy bien marcados y que tiene una trasera innovadora con la tira de luz LED recorriendo todo el ancho, además de la posibilidad de montar faros con tecnología OLED en los grupos ópticos traseros.
 
El resultado del conjunto es elegante y muy moderno, camuflando una carrocería que es realmente larga, aunque resulta bastante manejable, incluso en recorridos urbanos por el buen tacto de la dirección y la ayuda del tren direccional trasero que reduce el espacio de giro, además de aportar un toque de agilidad en carreteras de curvas, mejorando notablemente el comportamiento dinámico de un coche que sorprende con sus casi dos toneladas de peso, mucho más ligero que sus rivales.
 
Lo más destacado del nuevo A8 desde el punto de vista tecnológico es que viene preparado para la conducción autónoma en nivel 3, aunque este avance no hemos podido probarlo durante la presentación nacional del modelo en Sevilla, simplemente porque la legislación no regula todavía este apartado y habrá que esperar todavía algún tiempo. Según nos explicaron los responsables de Audi España, el coche está equipado con un sistema de 24 sensores entre los que se incluyen cámaras de visión 360º, radar y escáner láser, que se encargan de vigilar la carretera para que pueda circular de una forma completamente autónoma en autovías y autopistas hasta un máximo de 60 km/h, pudiendo acelerar y frenar según el estado del tráfico, llegando a detener por completo el coche y reanudando la marcha cuando sea posible. Y todo ello sin que el conductor intervenga en ningún momento en la dirección, acelerador y freno. En el momento en que se superan los 60 km/h el coche emite un aviso para que el conductor tome los mandos, y si no obedece, se detiene de forma segura.
 
Otra novedad destacada es que viene con un doble sistema de batería, la habitual de 12 voltios y otra adicional de 48 voltios de iones de litio situada en la trasera del coche, que se encarga de suministrar energía a los numerosos sistemas del vehículo. Su principal aplicación es ayudar al motor de arranque cuando el vehículo se detiene y entra en funcionamiento el sistema Start/Stop, reanudando la marcha de forma suave, y también cuando circulamos por autovía a velocidad de crucero, momento en que se produce una breve parada de la mecánica hasta que aceleramos de nuevo, lo que se denomina ‘navegación a vela’. El ahorro de combustible en viajes puede llegar a los 0,7 litros cada 100 kilómetros.
 
Y otra función en la que interviene la batería de 48 voltios es en la suspensión activa, que utiliza un motor en cada rueda para compensar el balanceo en las curvas, de manera que el coche gira más plano. Y cuando la cámara frontal detecta una irregularidad en el asfalto, prepara la suspensión, llegando a absorber hasta 8 centímetros de altura, de gran utilidad en carreteras con el asfalto muy roto o a la hora de pasar los numerosos badenes. Este sistema también sirve para controlar el balanceo frontal del coche en las frenadas, de manera que se evitan los desagradables cabeceos.
 
Comentados los principales avances estéticos y tecnológicos, pasamos al interior, un espacio elegante y confortable en el que la innovación también hace acto de presencia. Lo más destacado es la incorporación de una nueva pantalla táctil debajo de la del navegador de 10,1”, desde la que se controla el sistema de climatización y numerosas funciones. Desaparece el mando rotativo con touchpad de la anterior generación y prácticamente todos los botones –salvo el del volumen del equipo de audio- y todo se maneja desde estas dos pantallas táctiles inteligentes, porque el conductor recibe un clic de confirmación al activar alguna función.
 
Detrás del volante de cuero con los mandos de funciones rápidas para el manejo del equipo de audio, teléfono y control de velocidad de crucero adaptativo encontramos la instrumentación digital englobada en el virtual cookpit, una pantalla configurable que ocupa todo el espacio del cuadro de mandos en la que podemos elegir la información a mostrar, desde los clásicos relojes a un completo mapa de navegación o los datos del ordenador de viaje. El sistema de navegación utiliza mapas actualizados de Google gracias a la conexión a internet del sistema Audi Connect, que crea una red Wi-Fi en el vehículo para que los ocupantes puedan viajar navegando por Internet de alta velocidad.
 
Y un capítulo aparte merecen las plazas traseras, porque si el coche es una maravilla al conducirlo, habrá muchos usuarios que vean la vida pasar desde el asiento trasero, en el que disponen de masaje, regulación individual, calefacción y aire frio, pantallas en los reposacabezas para disfrutar de los contenidos digitales o navegar por Internet y un sistema de control en el reposabrazos central desde el que se manejan una gran cantidad de funciones. La insonorización y los materiales de gran calidad, además de la posibilidad de regular las luces del habitáculo crean un ambiente único.
 
En el momento del lanzamiento está disponible con un motor 3.0 TDI de 286 CV que sorprende por la rápida respuesta al acelerador y las buenas cifras de consumo (7,6 litros en un recorrido de 150 km por autovía a ritmo rápido), además de un brillante gasolina 3.0 TFSI de 340 CV que mueve con la soltura de un deportivo a esta berlina de dos toneladas de peso sin que el gasto de combustible sea excesivo (10,2 litros en nuestra prueba durante casi 200 kilómetros por carreteras de montaña). A final de año llegarán dos motores V8 en gasolina y diesel y más adelante una versión híbrida-enchufable con una autonomía en modo eléctrico de unos 50 kilómetros.
 
Ficha técnica
Audi A8 3.0 TDI 286 CV
Medidas
Longitud: 5.172 mm
Anchura: 1.945 mm
Altura: 1,473 mm
Batalla: 2.998 mm
Maletero: 550 litros
Depósito combustible: 82 litros
 
Motor
Tipo: gasoil, 6 cilindros en V
Cilindrada: 2.967 cm3
Potencia: 286 CV a 3750-4000 rpm
Par máximo: 600 Nm a 1250-3250 rpm
Tracción: total quattro
Cambio: Tiptronic 8 velocidades
 
Prestaciones
Velocidad máxima: 250 km/h
Aceleración 0-100 km/h: 5,9 segundos
Consumo medio: 5,6 litros
Emisiones CO2: 145 g/km
 
Precio: 97.430 euros
 
José A. Prados (Sevilla) – www.vidapremium.com

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