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Audi Q5 Sportback y SQ5 Sportback
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Audi Q5 Sportback y SQ5 Sportback
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Audi SQ5 Sportback
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Audi SQ5 Sportbac
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Audi SQ5 Sportbac
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Audi SQ5 Sportbac
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Audi SQ5 Sportbac
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI
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Audi Q5 40 TDI

Audi Q5 Sportback

04 de junio de 2021

La ligera caída del techo crea una línea coupé con un aspecto más deportivo, perdiendo algo de capacidad de maletero. Desde 55.810€,

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Las carrocerías Sportback se han vuelto muy importantes en la gama Audi. Nacieron como versiones más deportivas de modelos como el A3, A5 y A7, pero con el impulso que ha tomado el concepto SUV se trasladaron a modelos como el Q8 en 2018 para ofrecer un modelo más estilizado en la parte alta de la gama, y unos meses más tarde en el Q3 Sportback, sin olvidarnos del e-tron Sportback, este con mecánica 100% eléctrica. Y ahora le toca el turno a un modelo de gran volumen, el SUV de tamaño medio Q5, que ya tiene su versión Sportback, a la venta desde 55.810 euros.
 
Estas carrocerías SUV deportivas reciben la denominación de CUV, y ya acaparan el 20% de las ventas , una tendencia que va creciendo porque los clientes del segmento Premium cada vez apuestan más por la deportividad, aunque haya que pagar un precio algo más elevado, pero el diseño es muy importante. En el caso del Q3 Sportback ya suponen el 57% de las ventas y en el e-tron Sportback el 51%.
 
Partiendo de la base de un Q5, hay algunos detalles que cambian en el Q5 Sportback, como el frontal en el que la parrilla Single Frame octogonal toma mayor protagonismo, la firma luminosa LED –en opción faros Matrix LED- y las generosas tomas de aire inferiores. Pero los verdaderos cambios los encontramos en la vista lateral, con un techo que a partir del pilar central inicia un suave descenso para dar ese aspecto coupé, rematado por un spoiler de mayor tamaño y una trasera que añade un difusor de aire en los bajos, grupos ópticos LED que pueden llevar también tecnología OLED opcional con tres firmas luminosas a elegir, y listones cromados uniendo las ópticas.
 
Las dimensiones apenas varían, con una longitud de 4.69 metros (7 milímetros más por el difusor trasero), la misma anchura y una altura que se rebaja en dos milímetros para alcanzar los 1,66 metros. El maletero pierde algo de capacidad por la forma del techo, 40 litros, y las plazas traseras siguen siendo amplias, sin que la caída del techo afecte a la habitabilidad, salvo personas muy altas, que tendrán este mismo problema en otros coches. Mayor problema es la presencia del túnel central para la transmisión, que resta mucho espacio para los pies de los ocupantes de las plazas traseras, dejando la central para niños. La inclinación del portón trasero hace que la luneta vaya más tumbada de lo habitual, pero la visibilidad por el retrovisor interior es bastante buena.
 
El interior, de formas limpias y aspecto moderno, no sufre ninguna variación respecto al Q5, algo que consideramos un acierto porque está bien ejecutado, con buena calidad y un diseño atractivo. Además, cuenta con la ventaja de que hay mandos físicos para el sistema de climatización, que en otros modelos del segmento precisan entrar en complejos menús desde la pantalla. El Virtual Cockpit Plus de 12,3” con toda la información configurable detrás del volante es de serie y en el centro del salpicadero va la pantalla MMI Touch de 10,1” que aloja todo el sistema de infoentretenimiento.
 
Uno de los aspectos más destacados en las motorizaciones del Q5 Sportback es que todas tienen la etiqueta ECO al incorporar un sistema de hibridación de 12 voltios o etiqueta CERO emisiones de la DGT en las versiones híbridas enchufables (TFSI-e) con autonomía de hasta 62 kilómetros en modo eléctrico y. La electrificación es un hecho en el grupo Volkswagen, que ha anunciado inversiones de 35.000 euros para los próximos años, con muchas novedades hasta 2025 en que se invertirán 18.000 millones y lanzamientos tan importantes como el Q4 e-tron en julio y unos meses más tarde el Q4 e-tron Sportback.
 
En mecánicas convencionales hay tres opciones, 45 TFSI en gasolina con 265 CV, cambio S tronic y tracción quattro-ultra, y dos diesel, 35 TDi de 163 CV con cambio S tronic y tracción delantera, más el 40 TDI de 204 CV, cambio S tronic y tracción quattro-ultra. La versión más deportiva es el SQ5, con motor V6 TDI de 341 CV que lleva un sistema híbrido de 48 voltios para obtener la etiqueta ECO.
 
Las dos versiones híbridas enchufables reciben la etiqueta CERO al montar una batería recargable de 17,9 kWh que permite realizar hasta 62 kilómetros en modo eléctrico total. El 50 TFSI-e alcanza una potencia de 299 CV y el 55 TFSI-e asciende a 367 CV.
 
A igualdad de equipamiento, el Q5 Sportback tiene un incremento de precio respecto al Q5 de 3.000 euros, con tarifas que parten desde 55.810 euros para la versión básica, el 35 TDI de 163 CV en acabado Advance con tracción delantera, y que van hasta los 83.330 euros del SQ5 TDI con 341 CV, tracción total y etiqueta ECO. Para pasar del acabado Advanced -con el que comienza la gama- al S line, de aspecto deportivo, habrá que añadir 2.500 euros, y si queremos el Black Line, con detalles en negro, otros 3.250 euros.
 
El completo equipamiento de serie se puede mejorar con los paquetes City y Tour, además de la suspensión neumática adaptativa (opcional) que incorpora un modo de conducción offroad que puede elevar la carrocería 45 milímetros para circular fuera del asfalto y bajarla 15 milímetros en autopista para mejorar la eficiencia.
 
El listado de precios es el siguiente:
35 TDI Advanced: 55.810 euros
40 TDI quattro-ultra Advanced: 60.320 euros
45 TFSI quattro-ultra Advanced: 67.500 euros
50 TFSie quattro-ultra Advanced: 66.810 euros
55 TFSIe quattro-ultra S line: 73.210 euros
SQ5 TDI quattro: 83.330 euros
 
José A. Prados – www.vidapremium.com

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