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Alfa Romeo Stelvio 2.2 Veloce
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Alfa Romeo Stelvio 2.2 Veloce

Alfa Romeo Stelvio 2.2 Veloce

28 de julio de 2021

Este SUV italiano podría cerrar un ciclo tecnológico brillante en la historia de los diesel, un motor brillante con 210 CV refinado y austero.

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Es posible que el motor 2.2 JTDM de 210 CV con tracción total ‘Q4’ y cambio automático que monta el Alfa Stelvio 2.2 Veloce de nuestra prueba sea el mejor diesel jamás fabricado por la marca italiana, una especie en extinción sin que todavía haya una tecnología que iguale su eficiencia. Destaca por altas prestaciones, por eficiencia y por alto refinamiento. Se trata de un SUV deportivo, pero también ofrece el confort de un turismo de lujo.
 
El motor 2.2 JTDM puede que cierre un ciclo brillante en la historia de  los diesel, iniciado en 1997 con la tecnología Common Rail en el Alfa 156 JTD, y con el aporte exclusivo de Bosch en los primeros años para el grupo de marcas Fiat. Hoy día, la  mayoría de fabricantes poco se arriesgan en lanzar diesel potentes si se mantiene el acoso infundado a este combustible en algunos países europeos entre los que está España y, sobre todo, por lo difícil que será cumplir con la nueva normativa europea de emisiones para los diesel de más de 100 CV.
 
Plantar cara a los SUV Premium
Entre los competidores de este Stelvio con características y potencias similares se mencionan: el Audi Q5 Ultra 40 TDI quattroAut. S-Tronic de 204 CV etiqueta ECO (52.040€); el BMW X3 xDrive 20d 4x4 Aut.8v de 204 CV etiqueta ‘ECO’ (52.350€); el Land Rover Discovery Sport D200 MHEV, AWD Aut. 8v, 204 CV y etiqueta ‘ECO’ (48.800€); el Mercedes GLC 220d 4MATIC-Aut. 9v- de 194 CV, etiqueta ‘C’ (53.200€); y el Volvo XC90 Design D4 Diesel MildHybrid, AWD, automático de 211 CV, etiqueta ‘ECO’ (58.740€).
 
La técnica de la inyección directa diesel en conducto común (common rail) ha ido mejorando hasta crear esta joya mecánica de la ingeniería italiana, que es este 2.2 JTDM de 210 CV. La unidad de esta prueba no sólo se distingue por un consumo combinado ajustado para sus casi dos toneladas de peso con carga media, que es de 6,5 litros por cada 100 km (homologado con el protocolo WLTP), sino también por sus emisiones de NOx muy disminuidas, partículas de nitrógeno muy cuestionadas en los propulsores diésel, pero en este caso se ha podido optimizar hasta niveles por debajo de motores de gasolina con la misma potencia. Este ajuste fue posible gracias a una doble inyección de AdBlue, con un depósito para este suero de 16 litros.
 
Acoso infundado a las mecánicas diesel
Nos gustaría seguir probando vehículos diesel con estas características como las del Stelvio de este test, que tienen excelente relación prestaciones-consumo y se añade un funcionamiento suave, con mínimas vibraciones y con un notable confort acústico, al menos desde el interior.  Todo depende del buen entendimiento y diálogo entre responsables medioambientales de gobiernos europeos e ingeniería de marcas o empresas muy introducidas en esta materia como es Bosch. Los fabricantes de automóviles como las organizaciones técnicas del sector tienen el convencimiento de que, los motores de combustión y en especial los diesel, aún tienen mucho margen de optimización hasta que se establezca, si no hay cambio de rumbo, la electrificación total de la movilidad.
 
El Stelvio de esta prueba homologa un consumo combinado en ciclo WLTP de 6,5 litros por cada 100 km. Un buen registro para un vehículo de semejante porte y peso, y que, además, puede acelerar de 0 a 100 km/h en 7,6 segundos y alcanzar una velocidad punta de 210 km/h. El rendimiento también es notable. Entrega el par máximo de 470 Nm desde 1.750 rpm y se mantiene en un nivel alto hasta su máximo de potencia, que se establece en sólo 3.500 rpm.
 
Consumo y emisiones contenidas sin recurrir a la hibridación
Los modelos competidores señalados en el tercer párrafo, a excepción del Mercedes GLC diesel, han tenido que recurrir a la hibridación ligera (MildHybrid o MHEV)para lograr prestaciones similares a las de este Stelvio, pero igual han conseguido llevar la etiqueta ECO que otorga la DGT, algo que le falta a nuestro SUV italiano, aunque por consumo y emisiones, al igual que el SUV de Mercedes señalado, creemos que también deben ser distinguidos como  respetuosos del medio ambiente.
 
En nuestro recorrido habitual de pruebas, por autovía llana y en conducción individual en época de pandemia, el consumo medio ha sido de 6,4 litros por cada 100 km, ligeramente inferior al registro homologado. En tramos con dos ocupantes y mochila de 5 kg el gasto fue de 6,8 litros/100 km, por lo que la autonomía con este peso en desplazamientos largos puede ser de unos 845 km. En pistas de campo no muy complicadas y con algunos ascensos, el ordenador situó el consumo en 8,1 litros, y en ciudad, con tráfico normal en 8,9 litros, siempre cada 100 km como referencia.
 
Conducción fácil e intuitiva
El comportamiento dinámico del Stelvio probado es ejemplar. A través de los diferentes modos de conducción adapta su dinamismo a cada situación y formas de manejo del responsable del volante. Resulta muy fácil de conducir gracias a un control de mandos muy intuitivo. La consola central cuenta con un mando circular con tres posiciones: ‘d’ para conducción dinámica o deportiva; ‘n’ para conducción normal para el día a día y que puede situar a la amortiguación en un nivel confortable; y el ‘a’ para anteponer la eficiencia a las prestaciones.
 
La transmisión automática de ocho velocidades (de la firma ZF) también es adaptativa y en conjunto, con todas las ayudas electrónicas sitúa a esta versión en el nivel 2 de conducción autónoma, que no quiere decir que quitemos las manos del volante, pero sí nos ayuda a mantener la trayectoria indicada, a mantenernos en el carril, nos alerta de riesgos de colisión, nos asegura la asistencia al frenado de emergencia, nos avisa de vehículos en ángulo muerto de visión, cuenta con detección de fatiga del conductor, tiene control activo de velocidad de crucero, reconocimiento de señales de tráfico y detección de obstáculos e incluso frenada predictiva.
 
Confort de marcha excepcional
Las suspensiones del Stelvio de este test son firmes como corresponde a un SUV deportivo, pero con buena capacidad de absorber baches e irregularidades de la carretera. Permite un paso rápido por curvas y nos transmite mucha confianza, sobre todo a los que no están muy acostumbrados a la conducción rápida o deportiva. Nos ha ofrecido buena tracción, adherencia y estabilidad en todo momento, a pesar de llevar neumáticos de verano. No se ha percibido pérdidas de tracción en ningún tramo de la prueba, incluso en pasos o curvas con desniveles o firme deteriorado. En condiciones normales la tracción es trasera, y en zonas deslizantes o humedades se activa también la tracción delantera hasta en un 50%. La dirección, de respuesta rápida y tacto de asistencia variable según la velocidad, ayuda en gran medida a sentirse a gusto frente al volante.
 
El sistema de frenado del Stelvio probado es otro punto fuerte de esta versión. Cuenta con discos ventilados en las cuatro ruedas y pinzas de freno amarillas derivadas de la competición. Todas las frenadas se han mostrado muy progresivas, desde la normal ante semáforos rojos hasta las más contundentes y repentinas. En ningún momento hemos notado el efecto clavado. Las distancias de frenado están entre las más cortas entre  sus alternativas. Aunque los metros suelen variar según los neumáticos. Alfa Romeo nos da las distancias más comunes en el Stelvio. Distancia de frenado en seco de 100 a 0 km/h: en 36,5 metros; distancia de frenado en húmedo de 100 a 0 km/h: en 44 metros.
 
Habitáculo como para vivir en él
El interior rezuma bienestar y buen gusto por el diseño. El entorno de conducción presenta buenos  acabados, mejor calidad de materiales respecto a las versiones de 2017 y detalles muy cuidados. El puesto de conducción tiene múltiples reglajes con ajuste eléctrico y permite una buena altura del asiento del conductor como nos gusta a muchos, como para que no tengamos que memorizar a distancia algún objeto o bordillo que, cuando nos acercamos, puedan estar fuera de nuestro ángulo de visión. Los asientos de cuero fino son cómodos, como para viajar centenares de kilómetros sin notar cansancio. No son deportivos, más bien propios de una berlina de lujo. Presentan costuras muy prolijas y un llamativo tono “Venere Chocolate” según denominación de la marca, pero que para nosotros es como de un café con leche claro.
 
La habitabilidad es satisfactoria en todas sus medidas, en altura, anchura y espacio longitudinal para las piernas. Cuatro adultos de gran talla pueden viajar cómodos en el Stelvio. Detrás  sólo dos irán cómodamente, porque la plaza central es estrecha y con mullido duro, como en la gran parte de modelos, aunque no tan estrecha como los de sus competidores. Otra dificultad para esa plaza central es que tiene un túnel central elevado y aireadores algo retrasados que hacen difícil posicionar  las piernas. La capacidad de carga es grande. El volumen del maletero es de 525 litros y con un piso liso muy aprovechable para transportar bultos.
 
Dotación encaminada al lujo y el confort
La unidad probada ofrece una dotación de serie muy completa. Entre los elementos más importantes destacan: cuadro de instrumentos con pantalla a color de 18 cm (7”); alerta de cambio involuntario de carril; control de descenso en pendientes; levas grandes tipo orejones para cambio secuencial de marchas; lavafaros; llantas de aleación de 51 cm (20”); luces de bi-xenon adaptativas de 55W; luces interiores LED; luces traseras LED; Alfa Connect 3D Nav 8,8” con radio 3D, DAB, MP3, Aux-in y Bluetooth, compatible con Apple CarPlay y Android Auto; enchufe 12V; 2 puertos USB delanteros y 2 traseros; Pack Parking; pedales deportivos de aluminio, incluido reposapiés; sistema de audio de 8 altavoces; cámara de visión trasera; asientos delanteros con calefacción; climatizador bizona; guantera refrigerada; retrovisores con ajuste eléctrico y plegables; y volante calefactado.
 
En opción puede incluir: techo panorámico practicable; faros antiniebla de xenón; lona protectora de transporte; sonido Premium Harman Kardon con 14 altavoces y subwoofer; cargador inalámbrico para teléfono móvil; red de carga; enganche de remolque; portón trasero con apertura manos libres; cristales traseros tintados; suspensión deportiva adaptable; cristales con aislamiento acústico; rueda de repuesto; y alarma antirrobo.
 
La gama Stelvio arranca con el modelo 2.2 JTDM de 190 CV, que tiene un precio de 45.096 euros, y la versión probada, con el motor 2.2 Turbo de 210 CV está a la venta desde 58.075 euros con las promociones actuales de la firma italiana, y por encima únicamente se encuentra la versión de gasolina 2.0 Turbo de 280 CV, además del Stelvio Quadrifogrlio, con 510 CV, para entusiastas de la velocidad y buena cuenta bancaria.
 
Ficha técnica
Alfa Romeo Stelvio 2.2 Veloce Q4
Dimensiones
Longitud: 4.687 milímetros
Anchura: 1.903 milímetros
Altura: 1.671 milímetros
Batalla: 2.818 milímetros
Peso: 1.820 kg
Depósito combustible: 58 litros
Maletero: 525 / 1.600 litros
 
Motor
Tipo: gasoil, delantero longitudinal
Cilindros: cuatro en línea
Cilindrada: 2.143 cc
Potencia: 210 CV a 3500 rpm
Par máximo: 470 Nm a 1750 rpm
Tracción: total Q4
Cambio: automático 8 vel.
 
Prestaciones
Velocidad máxima: 215 km/h
Aceleración 0 a 100 km/h: 6,6 s
Consumo medio WLTP: 6,2 l/100 km
Emisiones CO2: 161 g/km
Etiqueta DGT: C
 
Precio: desde 58.075 euros
 
José A. Pradoswww.vidapremium.com

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