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Ford Focus Active

12 de junio de 2019

El cuarto acabado de la gama está enfocado a un uso más lúdico, muestra un estilo SUV y eleva ligeramente la carrocería. Desde 23.800 euros.

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La fórmula SUV arrasa en el mercado y cada vez es mayor el número de conductores que se decanta por este tipo de carrocerías con aspecto todoterreno urbano en diferentes tamaños y acabados. En Ford han decidido apostar por esta tendencia, no solo con modelos como el Ecosport, Kuga o Edge, sino también con una línea crossover denominada Active que está presente en KA+ y Fiesta, y a partir de ahora también en el nuevo Focus.
 
Se trata de un modelo más versátil que conjuga las características de los SUV con una carrocería más baja en espaciosas versiones de cinco puertas y familiar (Sportbreak), para lo que cuenta con una postura de conducción elevada y una configuración del chasis que deja intactas las grandes cualidades dinámicas de un vehículo que es un referente en su segmento. De este modo, el nuevo Focus ya cuenta con cuatro acabados –Trend, ST Line, Titanium y Active-, con precios desde 19.725 euros, además del lujoso Vignale con un equipamiento propio de vehículos Premium con un importe mucho más razonable.
 
El enfoque del Focus Active se dirige hacia un público que lleva un estilo de vida activo y que busca un coche que le acompañe en sus aventuras, diarias y del fin de semana. Para ellos Ford ha desarrollado un vehículo sobre una plataforma innovadora que permite hacer alguna escapada por pistas sin asfaltar al incorporar los nuevos modos de conducción ‘resbaladizo’ y ‘trail’. En el primero se ajusta el control electrónico de estabilidad y el de tracción para optimizar el agarre en superficies como barro, nieve y hielo, con una respuesta más suave del acelerador, mientras que en el modo ‘trail’ se ajusta el sistema de frenado antibloqueo para permitir un mayor deslizamiento de las ruedas en superficies como la arena.
 
La suspensión se ha modificado y ofrece 30 milímetros más de altura en la parte delantera y 34 mm en la trasera respecto a un Focus normal, con una altura libre al suelo de 163 milímetros para que pueda superar obstáculos sin dañar la mecánica. Hay que dejar claro que se trata de un vehículo con tracción delantera y con neumáticos de carretera, pero la electrónica está preparada para optimizar el agarre en pistas y caminos.
 
Los elementos diferenciadores de los Focus Active son la rejilla frontal con diseño de malla en color negro, paragolpes exclusivos para este acabado, un protector de los bajos plateado, molduras en los faros antiniebla, pasos de ruedas en color gris, faldones laterales, difusor trasero en aluminio, barras del techo en aluminio y llantas de 17”. Entre los nuevos colores de pintura se incluye el Blanco Metrópolis y Naranja Glow. En algunos colores de carrocería se puede solicitar de forma opcional el techo en contraste y los retrovisores exteriores a juego.
 
En el interior también encontramos alguna diferencia, como las costuras en color azul que identifican a los acabados Active, alfombrillas con costuras azules y detalles en acabado brillante en el salpicadero y los paneles de puertas. La palanca del cambio en las versiones con caja de cambios automática ha sido sustituida por un mando giratorio redondo que libera bastante espacio en la consola central, donde también va el botón del freno de estacionamiento eléctrico.
 
La conectividad de los vehículos Ford sigue siendo una nota destacada gracias al avanzado sistema SYNC 3, que permite controlar de una forma muy intuitiva las funciones de audio, navegación y climatización. Enlazando un teléfono inteligente por cable mediante Apple CarPlay o Android Auto es posible replicar algunas funciones en la pantalla del vehículo y se pueden gestionar algunos comandos mediante voz, por ejemplo para buscar canciones en la biblioteca de música y disfrutarla en el sistema de audio Bang & Olufen de 10 altavoces y 275 W como si estuviéramos en el salón de casa con un equipo de alta fidelidad.
 
Un aspecto a destacar es Ford Pass Connect, una aplicación para los smartphones que ofrece numerosas funcionalidades a través de un módem a bordo con el que se crea una red Wi-Fi a velocidades de hasta 4G LTE para un máximo de 10 dispositivos. Una vez instalada la aplicación y registrado el coche con el número de bastidor, se pueden realizar algunas funciones como arrancar el motor en remoto –un máximo de 15 minutos- y conectar el climatizador para que el habitáculo esté a la temperatura deseada, tanto en los fríos días de invierno como en los sofocantes días de verano. También se puede abrir o cerrar el vehículo a distancia y conocer su estado–niveles de aceite, presión de neumáticos o estado de la garantía-, además de reservar cita en el concesionario para pasar revisión.
 
El nuevo Focus Active ya está a la venta en carrocería berlina desde 23.800 euros en gasolina y desde 25.250 euros en diesel, mientras que los precios del Active Sportbreak arrancan en 24.800 euros en gasolina y 26.300 euros en diesel. Las mecánicas disponibles son dos de gasolina, el galardonado motor 1.0 EcoBoost de 125 CV que tiene un consumo medio de 4,8 litros y el 1.5 EcoBoost de 150 CV que gasta una media de 5,3 litros. En diesel está el 2.0 EcoBlue de 150 CV con un gasto medio de 4,4 litros.
 
José A. Pradoswww.vidapremium.com

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