Peugeot 508 SW

El Peugeot 508 Station Wagon de 2019 es claramente un modelo familiar de gama alta. Tiene 4,79 metros de largo y 40 mm más que el 508 Berlina también de nueva generación. Presenta un diseño impactante, un maletero con capacidad superior a la media del segmento y una calidad de conducción sobresaliente, como hemos podido comprobar en su presentación dinámica internacional.
 
Entre sus mejores cualidades figura un diseño bastante atractivo. Su silueta es  algo menos convencional que la del nuevo 508 Berlina, a excepción del frontal que es exactamente igual. Muestra un morro afilado, aspecto dinámico, muy atlético y con baja estatura (1,42 m de alto incluyendo las barras porta-equipajes). Según Peugeot, el 508 SW está inspirado en los Shooting Brakes, que no son otra cosa que vehículos familiares de perfil deportivo y con formato coupé, aunque tengan cuatro puertas.
 
La gama estará completa en 2019 con seis motores, dos de  gasolina,  tres de ciclo diesel y uno híbrido enchufable (Plug In). Todas las versiones y motores tendrán su lanzamiento comercial en la próxima primavera europea, a excepción del 508 SW Hybrid, que estará disponible a  partir del segundo semestre de 2019. Los de gasolina  son el 1.6 PureTech con dos variantes de potencia, de 180 y 225 CV. Ambos asociados a la nueva transmisión automática de convertidor de par ‘EAT’ de 8 velocidades que puede disminuir el consumo hasta en un 3%.
 
Motores diesel muy eficientes y ecológicos
Los motores diesel del nuevo 508 SW son el 1.5 BlueHDI de 130 CV y el 2.0 BlueHDI con variantes de 160 y 180 CV. Sólo el diesel menos potente puede tener cambio manual de seis velocidades o también automático EAT8 como el resto de versiones. Al igual que el 508 berlina, los niveles de acabado son el Active, Allure, GT Line y GT, que se unen a las versiones adelantadas First Edition ya disponibles con equipamiento Premium.
 
La gama de los nuevos 508 SW se presenta muy estirada en equipamientos y probablemente en precios, desde los más básicos propios de marcas generalistas, hasta los más estilosos que pueden ser alternativas de familiares Premium como los Audi, Mercedes-Benz o Volvo.  En cualquiera de sus versiones presenta buen empaque, por lo que puede ser un automóvil muy deseable por diseño y prestaciones.
 
Los precios definitivos se conocerán a principios de 2019, aunque se estima que, el costo adicional por carrocería familiar no superará los 1.500€ de cada versión berlina, cuya gama ya disponible arranca con descuentos de lanzamiento (3.000€), desde 27.250 hasta 41.900€.
 
Alternativa hasta de modelos premium
El Peugeot 508 SW puede ser alternativa de StationWagon Premium como el Audi A4 Avant, que tiene precios desde 35.700 a 47.000€.Tambiénserá rival mucho más económico del  Mercedes-Benz Clase C Estate, con versiones desde 43.000 hasta 56.000€ (con la excepción de las  deportivas AMG de 76.000 a 110.000€). O del Volvo V60, con precios desde 39.500 a 50.400€. De este último no hay que tener en cuenta las versiones 4x4, puesto que el nuevo ‘508’ en las dos carrocerías será siempre de tracción delantera, incluida la versión híbrida.
 
Entre los competidores de marcas generalistas, que también muestran ambiciones de gama alta, se mencionan, el Ford Mondeo Sportbreak Vignale, con precios desde 37.400 a 43.800€; y el Mazda6 Wagon, desde 26.000 a 39.000€.  No obstante, el nuevo 508 SW los podrá aventajar con muchas innovaciones, al menos hasta que no se actualicen.
 
Luces diurnas como espadas galácticas
Las novedades del “508 SW” empiezan en su exterior. Destaca su menor altura (6 cm inferior a la de su antecesor) que beneficia la aerodinámica. En el frontal resaltan sus faros Full LED y a los lados barras verticales que generan la iluminación diurna también LED y con aspecto de espadas galácticas. Las puertas no tienen marco y esto hace más  refinado al conjunto. Los umbrales laterales de entradas son cromados.
 
La trasera cuenta con una moldura en negro brillante en la que se enmarcan las luces traseras Full LED tridimensionales encendidas de día y noche. A cada lado del paragolpes trasero tiene un tubo de escape circular y cromado. El portón del maletero puede tener apertura eléctrica y el umbral del mismo es bajo (a 63,5 cm del suelo) y con una parte de acero inoxidable, lo que facilita la carga en sus 530 litros de capacidad. El suelo del maletero tiene raíles de aluminio en el acabado GT. Lo asientos traseros reclinados dejan una superficie lisa muy aprovechable para la carga, cuyo volumen aumenta a 1.780 litros.
 
Recarga de móviles por inducción
En el interior hay muchas novedades. Al igual que en el 508 Berlina el Station Wagon cuenta con la nueva generación del Peugeot i-Cockpit, como se denomina en inglés al cuadro de instrumentos y al resto del entorno de conducción, que es ahora más tecnológico y de diseño elegante. Un buen servicio es que los Smartphone’s de cualquier tamaño pueden recargarse por inducción en un hueco debajo de la consola.
 
Otros detalles del habitáculo son un volante forrado en napa (perforados en los acabados GT Line y GT); mando eléctrico por impulsos en la caja automática; revestimientos de aspecto carbono o madera natural en salpicadero, consola y paneles de puertas, según acabados (roble gris y madera selecta de Zebrano sólo en GT). También cromo satinado en volante, paneles de puertas, teclas de consola y marco de la  pantalla táctil.
 
En cuanto a sistemas de ayuda a la conducción lo tiene todo. Lo más novedoso y primicia en el segmento es el sistema de visión nocturna (NightVision) que cuenta con una cámara de infrarrojos y detecta seres vivos de noche o con mala visibilidad hasta 200 metros más lejos del alcance de las luces de carretera.
 
Aparcamiento automático muy completo
Para las versiones con cambio automático (como son la mayoría) cuenta con sistemas muy prácticos, como el regulador de velocidad activo ACC con función Stop&Go (distancia de seguridad ajustable); mantenimiento en el carril (LPA); y el Full Park Assist, una ayuda al aparcamiento muy completa, cuyo sistema gestiona automáticamente la dirección, el acelerador y el freno para entrar y salir de la plaza de aparcamiento.
 
La lista de sistemas continúa con el freno automático de emergencia, que detecta peatones o ciclistas de día y noche a velocidades desde 5 hasta 140 km/h, además de alerta de riesgo de colisión. Otras alertas son el cambio involuntario de carril con corrección de trayectoria desde 65 km/h; y la alerta de atención del conductor o detección de fatiga a velocidades superiores a 65 km/h por medio de análisis de pequeños movimientos del volante.
 
Entre las funciones más habituales se mencionan: lectura de señales de carretera; encendido automático de luces; vigilancia y alarma  de ángulo muerto a través de los retrovisores; faros Full Led con función de alumbrado estático en curva;  y dos luces traseras encendidas permanentemente con intensidad de luz adaptables al entorno.
 
La conectividad puede ser completa en el ‘508 SW’. Puede incluir navegación 3D conectada con TomTom Traffic; Función Mirror Screen compatible con los protocolos Android Auto y Apple Carplay, que puede funcionar con reconocimiento de voz. Incluye también recarga del Smartphone por inducción para dispositivos compatibles con la norma Qi; cuatro tomas de USB; llamada automática localizada en caso de emergencia (Peugeot Connect SOS &Assistance); y servicios telemáticos útiles para el mantenimiento del vehículo (Peugeot Connect Packs).
 
Al volante del Peugeot 508 SW
Aunque ya visto en salones y en las versiones adelantadas First Editon, el nuevo 508 StationWagon no deja de sorprender y más aún cuando nos sentamos frente al volante para conducir. Sorprende porque con su altura de 1,40 metros tiene un espacio interior muy generoso. Eso sí, para entrar hay que doblar el cuerpo más de la cuenta, y de hacerlo rápido también hay riesgo de un coscorrón en la cabeza, como me ha pasado en este  primer contacto. Pero grandes deportivos como los Porsche o Lamborghini tienen esto más pronunciado y nadie se queja.
 
Una vez dentro se está bien a gusto. En el habitáculo es elegante y predomina el confort. Puede tener un techo panorámico que abarca una superficie grande.    El puesto de conducción tiene ajustes adecuados para cada talla. Una vez en marcha comprobamos que todos los mandos tienen buen tacto y están muy a mano. Los asientos son cómodos y tienen múltiples reglajes (pueden tener hasta cinco modos de masajes). No nos ha gustado el pilar A, que es demasiado grueso y reduce la visión en curvas a la izquierda. En carreteras muy reviradas de Portugal pasamos muchos sustos con los coches que circulaban en sentido contrario y tendían a invadir nuestro carril.
 
Todas las versiones probadas incorporan el nuevo cambio automático de convertidor de par con ocho velocidades que se gestionan a través de una palanca con impulsos eléctricos, como en modelos de categoría alta. También se puede cambiar con levas detrás del volante, aunque ese modo sólo es práctico para una conducción algo más deportiva, que no hubo ocasión en esta jornada, y no por carreteras de Portugal con tráfico denso. Peugeot asegura que, con la tecnología de esta caja y  en el modo ‘eco’ puede ahorrar hasta un 3% de combustible.
 
Cambio automático muy adaptativo
Con este cambio automático, en mi caso, la ‘D’ de directa fue la elegida en todos los recorridos y en todas las versiones, no sólo por lo cómoda sino también por lo adaptable a mis modos de conducir. En curvas cerradas de 40-50 km/h no había necesidad de pisar freno, la marcha se reducía bastante con sólo levantar el pie. Otra virtud de esta transmisión automática es su respuesta inmediata y sin el mínimo efecto de patinado. Además,  el cambio de relaciones no se percibe ni es audible. La versión concambio manual no estaba disponible y sólo se incluye en la versión más básica. Puede que se incluya en más versiones en mercados fuera de Europa, ya que el ‘508’ es un modelo global.
 
Probamos en primer lugar, el diesel BlueHDI de 180 CV con acabado GT Line. Lo más sorprendente es su refinamiento e insonorización. Los únicos ruidos que llegaban al habitáculo eran de rodadura, pero bajos y nada molestos. Más difícil aún era determinar por su sonido el tipo de combustible del depósito y sólo se podía comprobar por el cuentavueltas. En el primer circuito de pruebas de unos 65 km, por autopistas de 120 km/h, pero también con grandes atascos, y por otras zonas de curvas también con mucho tráfico, hemos gastado una media de 5,4 litros/ 100 km. No mucho más que los 4,7 litros que registra en ciclo mixto con la nueva norma de homologación (cuyos niveles se establecen ahora en conducción normal por carretera): Peugeot asegura que, desde antes de la entrada en vigor de la nueva norma de medir emisiones, había conseguido en los diesel niveles muy bajos de CO2 y de NOx (nitrógeno), a tal punto que ya podrán superar las normas que entrarán en vigor en 2020. Estos valores pueden dar un nuevo giro al debate sobre los diesel en España.
 
Vuelven los diesel para hacer historia
Luego nos montamos en las versiones diésel de 160 y 130 CV, con algo menos de prestaciones y aceleración no tan contundente como la del diesel de 180 CV, pero más que suficiente para el día a día. En el 508 SW HDI menos potente se nota un poco el sonido de mecánica diesel, pero nada molesto y sin  vibraciones aparentes. Pero en cuanto a consumo se muestra muy ahorrador. Homologa un gasto en ciclo mixto de 3,8 litros/100 km y en nuestro recorrido la media reflejada en el ordenador del coche no ha pasado de 4,1 litros.
 
La versión de gasolina de 180 CV con acabado GT Line nos ha parecido de un refinamiento extremo. Todos sus mandos se pueden accionar con movimientos suaves. El consumo es ligeramente mayor que el diesel de 180 CV, pero también muy ajustado. Con las nuevas mediciones consume en ciclo combinado 5,5 litros/100 km y en nuestro recorrido no pasó de los 6 litros. No hay turismo de esta potencia y tamaño que gaste menos. En cuanto a respuesta y rendimiento es muy similar al diesel de 180 CV, pero en cuanto a ruidos es más silencioso, tanto en bajo como en alto régimen, similar a un vehículo eléctrico. Además muestra una calidad de rodadura excepcional.
 
Todas las versiones probadas en este primer contacto nos han parecido de un comportamiento dinámico ejemplar. Peugeot asegura que con esta carrocería familiar del ‘508’ consigue idénticas reacciones que con la del 508 Berlina. En cualquier caso se ha mostrado en general como un coche ágil y maniobrable, tanto en zonas urbanas como en carreteras de todo tipo. La dirección nos ha parecido rápida y precisa.
 
Las suspensiones se han mostrado confortables en todas las versiones probadas, y con buena absorción de baches. Pusimos toda la atención en las dos versiones de 180 CV de gasolina y diesel, que cuentan con un tren trasero de  arquitectura multibrazo, e incorpora una suspensión de amortiguación variable y pilotada (Active Suspensión Control) que opcional en las versiones que la pueden llevar y de serie en el acabado GT. Al pulsar el modo ‘Sport’ la amortiguación se torna más firme y se negocian las curvas con más confianza, aunque el recorrido de pruebas no era el apropiado para saber algo más de sus posibilidades.
 
Julio Benítez, Cascais (Portugal) – www.vidapremium.com