Jaguar i-Pace

Hace poco anunciábamos la llegada al mercado del primer SUV completamente eléctrico del mercado, el Hyundai Kona EV, y en unos días se ha roto el ‘monopolio’,  pues ya tiene otro modelo con el que compararse, aunque realmente pocos aspectos tienen en común por tamaño y precio, habría que fijarse más bien en un Tesla Model X. Lo cierto es que el segmento de moda también se pone las pilas y empezamos a ver productos que pueden ser realmente interesantes en un uso completamente normal, tanto en carretera como en desplazamientos más largos.
 
La tecnología eléctrica comenzó con coches de tipo utilitario como el Mitsubishi i-MIEV, compactos como en Nissan LEAF, Kia Soul EV o Renault ZOE, y ahora llega a un segmento en pleno crecimiento. La escasa capacidad de las baterías, con una autonomía que no llegaba a los 200 kilómetros, restringía su uso al ámbito urbano. Ahora la cosa cambia de forma radical con el Jaguar i-Pace, un SUV de 4,68 metros de longitud y un maletero de 656 litros de capacidad que anuncia un gran rendimiento con las baterías de iones de litio de 90 kWh, capaces de mover los dos motores eléctricos de 400 CV de potencia total durante un máximo de 480 kilómetros.
 
Por prestaciones se puede decir que tiene el comportamiento de un deportivo, poruqe es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,8 segundos gracias a una carrocería ligera y su comportamiento dinámico es de lo más ágil al llevar el centro de gravedad muy bajo (130 mm menos que un F-Pace) que reduce el balanceo de la carrocería y tener un reparto del peso perfecto: 50:50. Incluso puede montar un sistema de suspensión neumática opcional que mejora el confort y el comportamiento dinámico.
 
Las baterías de iones de litio de 90 kWh de capacidad están compuestas por un total de 432 celdas de alta densidad energética y una superior gestión térmica, ofreciendo energía suficiente para que el coche pueda recorrer hasta 480 kilómetros con una única carga, que se realiza en 40 minutos al 80% de su capacidad en un cargador rápido de 100 kWh o 100 kilómetros en tan sólo 15 minutos. Si realizamos la carga en una toma doméstica con un cargador de pared Wallbox de 7 kW, empleará 10 horas en tener la batería al 80% de su capacidad.
 
El propietario podrá realizar la gestión de la carga mediante una aplicación en su teléfono móvil o tablet, además de preparar el habitáculo a la temperatura deseada cuando se inicie el viaje, de manera que la batería se emplee únicamente para mover el motor, sin perder autonomía en la climatización. Mediante la frenada también se puede aprovechar la energía generada para transformarla en electricidad y aumentar la autonomía, disponiendo de distintas intensidades de frenado y la posibilidad de conducir durante mucho tiempo con el pedal del acelerador, ya que al levantarlo comienza la frenada.
 
Durante las pruebas de fiabilidad se han sometido las baterías a condiciones extremas, llegando a soportar hasta -40ºC, una situación en la que la baja resistencia de las celdas y el aislamiento del paquete de la batería, así como el avanzado sistema de gestión térmico han trabajado en armonía para permitir al i-Pace circular de forma normal.
 
Este modelo únicamente se comercializa con la motorización eléctrica de 400 CV y la batería de 90 kWh, en cuatro niveles de acabado, con la etiqueta ‘Cero’ emisiones de la DGT, por lo que podrá acceder a programas de subvenciones para la compra de vehículos eléctricos y está exento de pago en zonas de aparcamiento regulado. Las baterías cuentan con una garantía de ocho años y los precios de venta para el mercado español son los siguientes:

Jaguar i-Pace S: 79.100 euros
Jaguar i-Pace SE: 87.100 euros
Jaguar i-Pace HSE: 93.200 euros
Jaguar i-Pace First Edition: 103.500 euros
 
José A. Prados – www.vidapremium.com